AL PIE DEL CAÑÓN

No soy de los que «tira la toalla»; no pienso renunciar a mi Partido (PRD), al que he sido leal y por el que he dado más de 40 años de mi vida en orden a nuestros principios, ideología, historia y propósitos.

Lo que pretendo es que nos pongamos a un costado y abramos espacios y apoyemos  un proceso de «refrescamiento», una reforma, para la regeneración revolucionaria y democrática del PRD.

Ello implica, desde mi perspectiva, preparar y formar tecno-políticamente «cuadros» de relevo, con un liderazgo revitalizado, que comprenda la «nueva realidad», claros ideológicamente, y a la vez, con mentalidad y actitudes nuevas, en la dirección de reivindicar la dimensión ética de la acción política, y los valores que nos inspiran por el perfeccionamiento de nuestra independencia y desarrollo nacional, y la construcción de una mejor sociedad en un mundo que va deprisa, complejo y distinto al que tuvimos antes de la inédita pandemia.

Esa es mi posición y así la expreso…

Con mucho respeto, humildad y aprecio

Benjamín Colamarco Patiño

Panamá, 11 de octubre de 2024

ALGO SOBRE EL PUENTE DE LAS AMÉRICAS

En abril de 2006 se presentó el informe que contempló un diagnóstico de la situación del Puente de Las Américas, realizado de manera conjunta MOP – ACP, a través de la firma Amman & Whitney/Louis Berger Group. En ese momento se establecieron tres (3) ETAPAS, cada una con varias fases, para el mantenimiento y rehabilitación del puente.

La primera de esas Etapas fue adjudicada por el MOP al consorcio Asociación Puente de Las Américas por 12 millones de Balboas, e incluyó la ejecución de tres (3) fases.

*En la fase 1 que inició en abril de 2008,* se trabajó en la inspección de todo el sistema estructural recabando información de campo sobre las uniones de las péndolas al arco de la superestructura, los apoyos del puente, las uniones estructurales y el perfil de la rodadura del puente.

Durante la fase 2 se realizó un modelaje de todo el sistema estructural del puente; se diseñó el nuevo sistema de las péndolas y se fabricaron los cables correspondientes. En esta fase se actualizó también el modelo sísmico usado para la construcción del puente entre 1958 y 1962, modelo que databa de los años ’40, actualizado a los modelos matemáticos usados para calcular el modelo sísmico  del Puente Centenario del año 2002.

La fase 3 correspondió a la obra en sitio con la protección del rompeolas de las pilas principales, la reparación de los apoyos, columnas y pilas, reposición de algunos remaches y con el cambio de 168 cables en las 42 péndolas de la estructura del puente.

*Los trabajos correspondientes a estas primeras tres fases del mantenimiento finalizaron en mayo de 2009.*

Las Etapas 2 y 3,  debieron haber iniciado en enero del 2010 y debían terminar en el año 2012 con la sustitución de losas del tablero de la rodadura existentes y su reemplazo con losas de concreto prefabricadas.

El Puente de las Américas debe mantener un nivel elevado de mantenimiento que permita garantizar la seguridad del tráfico ininterrumpido y seguro de los vehículos a motor con sus ocupantes y también de los barcos por la vía Interoceánica.

Benjamín Colamarco Patiño

Panamá, septiembre de 2024

ASÍ PIENSO…

Mi Padre y mi Madre, a quienes siempre he hecho todo por honrar, me inculcaron valores que atesoro:
honestidad, responsabilidad,  amabilidad, gratitud, humildad, lealtad, amor y solidaridad, que, con un recto sentimiento del deber patrio, disciplina y perseverancia, han definido la forma correcta de mi comportamiento de vida.

Luego, durante mis años de estudios superiores en Italia, además de esforzarme por alcanzar el máximo desarrollo de conocimientos y capacidades, me interesé por conocer la trayectoria, la vida y obra de pensadores y políticos como Edward Bernstein, Filippo Turati, Giuseppe Saragat, entre otros, lo que fue formando en mi mente un criterio y un convencimiento sobre los principios de la Socialdemocracia.

Mientras estudiaba e investigaba en la universidad de Bologna, militamos con otros estudiantes, con esos bríos de la juventud y el idealismo palpitante, en solidaridad con los pueblos en lucha por su autodeterminación e independencia y por el afán histórico de Panamá por recuperar nuestra plena integridad soberana, con admiración por el liderazgo del General Omar Torrijos.

Y no escatimé también algún espacio para la música que me apasiona.

De regreso a la Patria, me inscribí en el Partido Revolucionario Democrático, único partido en que he militado por más de 42 años consecuente e ininterrumpidamente.

En el Partido tuve maestros como Rómulo Escobar Bethancourt, Alma Montenegro de Fletcher, Gerardo González, Berta Torrijos, Humberto Brugiatti, entre otros.

He vivido una vida plena de sentido, una historia como muchas, con altas y bajas, con éxitos y caídas. No he perseguido recompensas, ni me han hecho arredrar desventuras.

Ha sido una senda de constante adaptación, revisión y cambio, pero siempre con las raíces bien firmes en mis valores y principios.

Atribuyo la misma importancia a estos tres principios fundamentales: libertad, igualdad y solidaridad, que son interdependientes, cada uno de ellos es un requisito previo para los otros dos. Mientras que la justicia social, la autodeterminación y la paz, integran para mi, el conjunto de valores primordiales.

Mantengo una fuerte voluntad por materializar sueños e ideales por una mejor sociedad en un país soberano, libre de todo tipo de colonialismo, pero con la inteligencia para insertarnos en los cambios geo-políticos que se avizoran en el mundo y aprovecharlos en función de nuestros intereses nacionales y desarrollo.

Si me preguntan ¿qué tipo de sociedad? Siempre he planteado una sociedad materialmente más equitativa, socialmente más justa, culturalmente más avanzada y ambientalmente más sostenible, basada en 6 elementos clave: economía, trabajo, educación, innovación, equidad, y justicia social.

Ahora bien, la humanidad está viviendo un cambio de era, a una velocidad vertiginosa y con  factores que la hacen más compleja; desde mi lectura y apreciación, es un cambio de época civilizatorio. Pasamos de la sociedad industrial, a la sociedad de la información, la del conocimiento, otros la llaman la «posmoderna», que estamos pasando la «cuarta revolución industrial» con rapidez y profundidad desconocidas en anteriores cambios históricos.

Todos tenemos la capacidad de pensar, todos analizamos, tenemos ideas y creencias, siempre habrán diferencias, contrastes, contradicciones. Mi Padre siempre decía que «el camino es pensar», nadie tiene el monopolio de la verdad.

Por esa razón, intento siempre exponer algunas de las ideas que me definen, que enmarcan mi perspectiva, para contrastar con otras.

Benjamín Colamarco Patiño

Panamá, 23 de junio de 2024